Descubra las estrategias esenciales de cobertura cambiaria y las mejores prácticas de gestión de divisas de la mano de nuestros expertos en divisas.
3 errores comunes al cubrir el presupuesto (y cómo evitarlos)
En nuestro blog anterior, analizamos qué tipo de parámetros de fijación de precios deben guiar la elección de un programa de cobertura cambiaria (puedes leerlo 👉 aquí).
Observamos que proteger el tipo de cambio presupuestado, período a período, debe ser una prioridad para las empresas que utilizan un modelo de fijación de precios “basado en catálogo”.
Este segundo artículo se centra en los errores más comunes que cometen los equipos de tesorería al intentar cubrir los presupuestos corporativos. Entre estas ideas erróneas se incluyen:
- Confundir campaña y presupuesto. Los periodos de campaña pueden solaparse con los periodos presupuestarios, y esta confusión debes evitarla como responsable de riesgo cambiario.
- Fijar un tipo de cambio presupuestado inadecuado. La elección del tipo presupuestado puede quedarse corta en términos de alcanzabilidad y estabilidad; te mostramos cómo se puede mejorar.
- Cubrir de inmediato. Este enfoque clásico deja a la empresa a merced de la precisión de las previsiones y puede dar lugar a un rendimiento financiero inferior al esperado.
¿Campaña o presupuesto? Un clásico concepto erróneo
La confusión entre los periodos de campaña y de presupuesto es frecuente. Piensa en el ejemplo de una empresa que establece sus presupuestos 2024 y 2025 proyectando un estado de resultados previsto, como se muestra en la ilustración siguiente.
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Los periodos de campaña y de presupuesto pueden coincidir o no. No hay razón para que un presupuesto anual se ajuste exactamente a los ingresos y gastos previstos de una campaña individual. De hecho, lo más habitual es que no coincidan, como sucede en empresas de moda que presentan diferentes colecciones a lo largo del mismo año.
Las preguntas clave para tu equipo de tesorería son: ¿cuál es la exposición que debes cubrir? ¿Y cuándo se espera el correspondiente vencimiento? En nuestro ejemplo, cubrir las cuentas por cobrar previstas desde el inicio hasta el final del año generaría una doble confusión:
- Confusión sobre la exposición. Solo se cubrirían 200 millones de euros en lugar de los 300 millones de la campaña. Lo que debes proteger es el tipo de cambio presupuestado de la campaña, no el tipo de cambio del presupuesto anual.
- Confusión sobre las fechas de valor. En nuestro ejemplo, los vencimientos se esperan tanto en 2024 como en 2025. Este es el “momento de flujo de caja” que te informa sobre el horizonte de cobertura, es decir, las fechas de valor de los instrumentos derivados correspondientes.
La solución correcta es cubrir la exposición prevista de una campaña hasta la fecha de vencimiento esperada de las transacciones comerciales correspondientes. Esta política te permite proteger de manera efectiva la exposición económica real al riesgo cambiario, aunque es fundamental comunicarla claramente al equipo directivo para evitar confusiones.
Cómo elegir el tipo de cambio (FX) presupuestario
Existen varias formas de establecer un tipo de cambio presupuestado, es decir, el tipo de cambio que se utiliza para fijar precios durante una campaña o período presupuestario específico. La siguiente tabla, tomada de Bloomberg, muestra algunos ejemplos de prácticas comunes en la elección del tipo presupuestado:

Como se observa en la tabla, las preguntas clave sobre el tipo presupuestado son: (a) ¿es alcanzable? (b) ¿es realizable? (c) ¿es estable? Tomemos un ejemplo: si tu equipo de tesorería utiliza el tipo spot vigente al momento de elaborar el presupuesto, la cuestión de su alcanzabilidad depende en gran medida del coste de financiación (cost of carry).
Este coste de financiación, a su vez, está determinado por la diferencia de tipos de interés entre las divisas. Cabe destacar que este aspecto ha cobrado mayor relevancia desde 2021, cuando los bancos centrales comenzaron a aumentar las tasas de interés —cada uno a su propio ritmo— para combatir la inflación y las expectativas inflacionarias.
Markups cambiarios: el caso de un tipo de cambio fuera del mercado
Fijar un tipo de cambio fuera del mercado es una práctica ampliamente aceptada al calcular el tipo de cambio que se incorporará a los precios.
Un ejemplo ayuda a entender cómo puede construirse. Una empresa con sede en Europa y con el euro como moneda funcional compra mobiliario en Asia, pagando en USD. La firma vende en Europa durante un periodo de campaña, a un “precio calendario” fijo en euros.
Para determinar el tipo de cambio presupuestado que se incorpora a los precios, el equipo de tesorería toma como referencia el tipo spot EUR-USD vigente al momento de crear el presupuesto. Luego, “desvía” ese tipo de cambio, por ejemplo, un 3 %. Este tipo de cambio menos favorable constituye un markup.
De este modo, se obtiene un margen de beneficio mayor que el que ofrece el tipo spot vigente. En el siguiente blog veremos cómo los tesoreros pueden usar órdenes condicionales stop-loss para proteger de manera efectiva ese tipo de cambio durante todo el periodo presupuestario.
Por ahora, conviene tener presente el equilibrio que debe manejar el equipo de tesorería: a mayor markup, más estable y alcanzable será el tipo presupuestado, pero mayor será el impacto negativo sobre la posición competitiva de la empresa.
Por ello, en el caso de puntos a plazo favorables —por ejemplo, al comprar en una divisa que cotiza con descuento a plazo o al vender en una divisa con prima a plazo—, estos markups podrían resultar innecesariamente costosos.
- Spot EUR-USD at budget creation: 1.0730
- FX markup: 3%
- EUR-USD budget rate: 1.0730 * 0.97 = 1.0408
¿Cubrir de inmediato? No te confíes
Al hablar de cómo cubrir el presupuesto, muchos manuales —y numerosos asesores— se limitan a una solución sorprendentemente simple y de talla única: cubrir toda la exposición presupuestada justo al inicio del periodo presupuestario.
Como ya saben los lectores de este blog, este enfoque no contempla la variedad de situaciones reales. Cubrir de inmediato toda la exposición prevista solo debería considerarse si se dan dos condiciones: (a) previsiones prácticamente perfectas; (b) puntos a plazo favorables.
Cuando los puntos a plazo son desfavorables, o cuando la precisión de las previsiones es menor de lo ideal, esta estrategia puede no ser la mejor manera de alcanzar los objetivos del equipo financiero. Cubrir de inmediato expone a la empresa al riesgo de infracobertura o sobrecobertura, así como a un rendimiento financiero subóptimo.
Como veremos en el siguiente blog, las soluciones de automatización de FX permiten al equipo financiero enfrentar estos riesgos aprovechando lo que llamamos los beneficios de la demora. Posponer la ejecución de las coberturas aporta ventajas cuantificables en términos de optimización financiera y gestión de garantías.
Además, permite a los equipos de tesorería aprovechar la información proveniente de distintos sistemas de la empresa, reduciendo así las preocupaciones sobre la precisión de las previsiones. Este será el tema de nuestro próximo blog.



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